El Búho está que no cabe en sí de gozo. A los no incluidos bajo el epígrafe de ñoñostiarras debo hacerles saber que estamos en plena Semana Grande Donostiarra o, lo que es igual, la semana de fiestas de este pueblo. Nunca hemos sido un sitio de excesos como los de Pamplona en Sanfermines o la Batalla del Vino en Haro (por citar algunas próximas) y los referentes festivos de toda la vida en este lugar han sido los fuegos artificiales en el "marco incomparable" de La Concha y poco más.
Pero en los últimos años y, particularmente, durante el pasado cuatrienio legislativo municipal bajo el gobierno de los alegres y combativos (léase Bildu para los no iniciados), se ha consolidado en el programa de fiestas una versión "alternativa", cuyo evento más sonoro es el abordaje de una turba de "piratas" que, partiendo del pequeño puerto donostiarra (se supone que un ámbito popular), acaba desembarcando en la Playa de La Concha (se supone que un marco elitista, lo cual es mucho suponer hoy en día). Los "piratas" realizan la toma de la playa sobre una serie de "embarcaciones" construidas al efecto y que, como se puede ver en la foto que ilustra esta entrada y que podéis ampliar picando en ella, están construidas fundamentalmente por plásticos, mal que les pese a los organizadores, cuyo sesgo es evidente para todos los que aquí vivimos.
Plásticos como el polietileno con el que se fabrican los "globos" blancos que se ven en la parte alta de la foto y que, si uno busca en internet con un poco de habilidad, le dirán que es un plástico que contiene aditivos, catalizadores y productos derivados de las altas temperaturas necesarios para convertirlo en los susodichos globos. Todos esos productos son cancerígenos o sospechosos de serlo.
En la foto hay otros plásticos amarillos o de otros colores, que no puedo precisar si estarán fabricados con PVC o con polietileno pero, en cualquier caso, con colorantes añadidos, que ya se sabe que pueden migrar al agua y causar efectos sin cuento. Algunos de los "piratas" visten trajes de neopreno, una forma comercial o eufemística de denominar al plástico que, desde los años cincuenta, se llama realmente cloropreno y que, como su nombre indica, contiene el mismo cloro del PVC, un elemento químico "favorito" de las campañas de Greenpeace. Otros sustentan sus "naves" en neumáticos de caucho vulcanizado, vulcanización conseguida gracias a compuestos de azufre que tampoco son angelitos y que también pueden migrar al agua de la bahía. Además, una vez vulcanizados esos neumáticos son casi indestructibles, a no ser que uno los queme de forma controlada, en incineradoras o cementeras, o de forma incontrolada, como en el incendio que el pasado junio ocurrió en el vertedero de Seseña. Es cierto que si uno mira la mencionada foto con detalle, o lupa, de vez en cuando se ve algún trozo de madera, el material natural que debería ser el único constituyente de semejante abordaje, a tenor de la filosofía de los convocantes del evento. Pero claro, luego se montan un par de vasc@s comme il faut en esa balsa de madera y la misma se va al garete.
Por no hablar de las cremas protectoras que algun@s se darán para no quemarse en un día como el de ayer, un tanto caluroso. Repletos de productos químicos de todo tipo (parabenos, disruptores endocrino, nanopartículas, etc.). O, para terminar, habría que tener en cuenta lo que habrán miccionado los "piratas" durante el evento que, combinado con los derivados de cloro que las almadías habrán soltado al agua, pueden generar todo tipo de organoclorados.
En fin, no tengo duda alguna (aunque no lo verá este Búho) de que el Abordaje de la Semana Grande será "algo tradicional" en pocos años. Pero creo que deberán reinventarlo si quieren estar al loro de lo que se cuece medioambientalmente.
Y me perdonen Uds. por tanta comilla introducida y por exagerar en grado superlativo los posibles efectos perniciosos de la jornada festiva, efectos que mis sufridos lectores habituales seguro que no se han creido. Pero es lo que se lleva.
Pero en los últimos años y, particularmente, durante el pasado cuatrienio legislativo municipal bajo el gobierno de los alegres y combativos (léase Bildu para los no iniciados), se ha consolidado en el programa de fiestas una versión "alternativa", cuyo evento más sonoro es el abordaje de una turba de "piratas" que, partiendo del pequeño puerto donostiarra (se supone que un ámbito popular), acaba desembarcando en la Playa de La Concha (se supone que un marco elitista, lo cual es mucho suponer hoy en día). Los "piratas" realizan la toma de la playa sobre una serie de "embarcaciones" construidas al efecto y que, como se puede ver en la foto que ilustra esta entrada y que podéis ampliar picando en ella, están construidas fundamentalmente por plásticos, mal que les pese a los organizadores, cuyo sesgo es evidente para todos los que aquí vivimos.
Plásticos como el polietileno con el que se fabrican los "globos" blancos que se ven en la parte alta de la foto y que, si uno busca en internet con un poco de habilidad, le dirán que es un plástico que contiene aditivos, catalizadores y productos derivados de las altas temperaturas necesarios para convertirlo en los susodichos globos. Todos esos productos son cancerígenos o sospechosos de serlo.
En la foto hay otros plásticos amarillos o de otros colores, que no puedo precisar si estarán fabricados con PVC o con polietileno pero, en cualquier caso, con colorantes añadidos, que ya se sabe que pueden migrar al agua y causar efectos sin cuento. Algunos de los "piratas" visten trajes de neopreno, una forma comercial o eufemística de denominar al plástico que, desde los años cincuenta, se llama realmente cloropreno y que, como su nombre indica, contiene el mismo cloro del PVC, un elemento químico "favorito" de las campañas de Greenpeace. Otros sustentan sus "naves" en neumáticos de caucho vulcanizado, vulcanización conseguida gracias a compuestos de azufre que tampoco son angelitos y que también pueden migrar al agua de la bahía. Además, una vez vulcanizados esos neumáticos son casi indestructibles, a no ser que uno los queme de forma controlada, en incineradoras o cementeras, o de forma incontrolada, como en el incendio que el pasado junio ocurrió en el vertedero de Seseña. Es cierto que si uno mira la mencionada foto con detalle, o lupa, de vez en cuando se ve algún trozo de madera, el material natural que debería ser el único constituyente de semejante abordaje, a tenor de la filosofía de los convocantes del evento. Pero claro, luego se montan un par de vasc@s comme il faut en esa balsa de madera y la misma se va al garete.
Por no hablar de las cremas protectoras que algun@s se darán para no quemarse en un día como el de ayer, un tanto caluroso. Repletos de productos químicos de todo tipo (parabenos, disruptores endocrino, nanopartículas, etc.). O, para terminar, habría que tener en cuenta lo que habrán miccionado los "piratas" durante el evento que, combinado con los derivados de cloro que las almadías habrán soltado al agua, pueden generar todo tipo de organoclorados.
En fin, no tengo duda alguna (aunque no lo verá este Búho) de que el Abordaje de la Semana Grande será "algo tradicional" en pocos años. Pero creo que deberán reinventarlo si quieren estar al loro de lo que se cuece medioambientalmente.
Y me perdonen Uds. por tanta comilla introducida y por exagerar en grado superlativo los posibles efectos perniciosos de la jornada festiva, efectos que mis sufridos lectores habituales seguro que no se han creido. Pero es lo que se lleva.
También se observa a un pirata con una "litrona" de cerveza en la mano, reconocido cancerígeno tan de moda estos días. Le daremos el beneficio de la duda y pensaremos que es sin alcohol y que después buscó un contenedor verde para depositar el envase vacío.
ResponderEliminarSalud
Ironía de la fina, sí señor. Me ha diverido mucho.
ResponderEliminarMe imagino que, como corresponde a buenos piratas, las naves quedarán abandonadas en la playa para que las recoja "alguien".
ResponderEliminarHay que decir claramente que no. Yo estuve la mañana siguiente en la playa y estaba impoluta.
ResponderEliminarMe he reído mucho con la fina ironía y sentido del humor del Búho. Cuando afirma que en Donosti no son dados a los excesos, me he acordado del increíble y desolador aspecto que presentaban los aledaños al circuito, dentro de la ciudad, en la pasada Behobia-San Sebastián. Claro que no solo debido a los excesos "ñoñostiarras"...
ResponderEliminarDos correcciones: ya en otra ocasión le apunté al Búho que el verbo aditivar no existe. Por tanto, en el largo párrafo de la foto debería figurar: con colorantes añadidos. Y no fomente el Búho el Queísmo galopante que nos rodea (soy consciente que...;me he dado cuenta que...; estoy seguro que...) por ello, en el penúltimo párrafo: no tengo duda alguna( ) de que...
Los posts del Blog del Búho no están completos hasta la revisión gramatical de Alexforo. Corregido todo.
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